sábado, 14 de septiembre de 2024

adornos ilustres






















otra vez el gesto de la estatuilla de al lado

la santa de las cosas pequeñas y resulta ser que nada quiere decirnos

dice que es un gesto involuntario

como si algún nervio soltara hombro codo y mano 

en un látigo de auxilio 


las ranas brillantes esperan a mi lado la primavera 

que nos deje algo sobre este mueble

el mundo espera ser lustrado


Buda digiere las cosas, lleno de polvo, igual que los demás

menos que el cenicero y los cuencos

las carpetitas tejidas marcan la clase y la fe

yo no sé que soy, llevo un pegote en mi lado derecho

desde la reunión de aniversario

no sé que soy, un souvenir de los ochenta 

una artesanía de niña


dios! los ademanes de la virgen,

serán las visiones que salen del vapor 

del contraste entre materia y oxigeno

cuando el rayo de sol nos hace de faro?

o la fiebre de los cachados

 

no puedo asumir ningún compromiso

porque acaso aquí todos son figurativos?

pero que mundo mueble este, sobre el que deposito las ganas de mi superficie áspera 


(sin dudas no me han terminado)


tengo ganas de besar

una porcelana fría 


todos son figurativos en este estante de clase media?

todos somos recuerdo de alguien, de algo, 

y negamos el tiempo para seguir existiendo?


yo no sé que soy

(sin dudas no me han terminado)

la forma se aproxima a una foca 

pero en el reflejo de un cristal cercano, 

soy el gorro de un duende en escala


a centímetros de mí  - yo  cosa rara - 

está la piedra que me gusta

llegó una noche, ebria 

apretada en un puño de sudor 

y allí quedó cerca mío 

 

y que coincidencia!

cada vez que siento amor en mi pecho abstracto

y olvido no saber quien soy en mi pecho abstracto 

y mí corazón late suelto imaginado abstracto,

esa virgen me hace el ademán aquel

que dice que no es nada

que es involuntario


y me dan muchas ganas de sacudirme

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