viernes, 2 de julio de 2010

Dale, vamos

Ya que estás, en este precioso reloj
dame la hora

Ya que manejás, en esta desolada ruta
lleváme lejos

Ya que volás, en este ajustado tiempo
sopláme la cara
y despertame o voláme hasta el agua

Y si no,
si existimos así
y me agarrás los pies,
ponéte liviano
para que te siga llevando

el hemisferio del patio

tenian la misma edad antes y vivían en el mismo barrio se sabían en las meriendas  extendían la plaza y la pileta  a las sobremesas atiborra...