miércoles, 31 de octubre de 2018

el otro aparece al final

no conozco la gruta donde el mar roba cada atardecer
ni las calles empedradas de difícil andar, por el amor,
por el desnivel de las rocas, por el espacio que dejaste

no viajé hasta ese mediterráneo de ocio
donde es el blanco más blanco lo que adormece
al propio horizonte hasta dejarlo en siesta

no logré enredarme entre las ramas
de esa selva que promete guardarnos el agua
sí, claro, para los días de sed

no tomé el metro ni me reflejé en las vidrieras
en esas avenidas de carteles luminosos
mas que las estrellas en la noche

no respiré sobre las ruinas
ni me puse hierbas bajo la lengua
para andar la sabiduría

no nadé todo el océano
ni dí contra islas ni barcos hundidos
tampoco encontré la orilla que tamiza

giro sobre mi propio eje, como me aconsejaron, y así avanzo como un trompo

cuando me detengo al principio no se quien soy

luego ya aparento una total ebriedad

y sueño profundamente

que viajo lejos

sin equipaje

Después abro los ojos lentamente, me cuento los dedos de las manos, hago el paneo del sol de frente, pienso muy poco y me levanto. Comienzo a andar, algo me dice lo de siempre, me enseñan otra vez todo mientras desayuno un pedazo de pan que desgarro con mis dientes. Tomo conocimiento de algún que otro dolor del cuerpo, le envío indiferencia a modo de luz y continúo.

soy mas real que los paisajes
y el tiempo me transcurre por dentro
como me explicaron al principio
cuando me ponían cada ladrillo
y me cosían las costuras
"una dura confección" como nos gusta decir
y nos reímos tanto, con eso

"nada hasta el punto débil, colócalo en tu cintura y luego déjate llevar por las olas, por el viento, por cada puesta de sol y acaba en la arena naufragada de olvido, déjate amar por lo que sea, no estás muerta, solo conoces poco" como de decías.



jueves, 18 de octubre de 2018

un descuido el azar y dios

en otro descuido me desvanecí y antes de abandonarme como cada vez,
el azar, me tomó de la cintura, arqueó mi espalda
y comenzó la delicada tarea de extraer cada palabra incrustada en mi alma
como astillas en la piel... amor, desastre, no no y no
fueron extirpadas de la clara y gelatinosa sustancia que me sostiene

(dicha sustancia protege, apoltrona, acuna y despilfarra al ego tres veces por día e intercambia fluidos ilegales con el corazón)

lejos de dios la purificación de mi deriva
porque no dar más es parte de lo ateo,
pero cansarse es una ceremonia de comunión
donde a la noche de bodas se llega patinando en sudor
y cada día arremete intenso y arrepentido
para dar con el perdón en ayunas

la culpa es una materia ignorada por los verdaderos felices
que se contornean en la periferia de nuestro planeta,
otro que el azar haciendo de las suyas

recuerdo un viejo descuido en el que desperté abrazada al estómago del destino, subía y bajaba acompasada por la música de sus latidos, estuve muerta un rato


sábado, 13 de octubre de 2018

esas mis mujeres

me vuelvo loca
otra vez mis sirvientas están desordenando las alacenas
cambiando de lugar los souvenirs de mis comuniones pasadas
quitándole trofeos a los logros y separando el brillo de lo pulcro

me pongo nerviosa
otra vez mis sirvientas me tiran la letra a la basura
me llenan la cocina de carnaval, baten la papaya por todos lados
escapan al trabajo por hora y me escupen el índice

me quedo varada cuando desacomodan mi cielo
esas mis mujeres,
las que nacieron con el cabello en contra de la moda
me acreditan dignidad dentro sus uniformes
complotadas gracias a dios
contra el orden establecido

fuertes se van limpiando puños sobre muslos

yo sé que cuando me sospechen nuevamente dentro del pastel, volverán por mí

miércoles, 5 de septiembre de 2018

no es buen diagnóstico para nadie

proyecta sus pastillas en los días que siguen
a un lado y al otro de la soga
sobre la que experta ya en caídas
intenta el equilibrio

expone en una columna,
la necesidad dormida
y la curiosidad despierta
no le sale, tacha

no es buen diagnóstico para nadie

continúa evaluando posibilidades
tres celestes, una almeja
y se siente otra vez la esclava
que arrastra lo que no es
para alguien que no existe

mastica y no traga
el pensamiento puede ser un tapón
que obstruye sus vías respiratorias
como cenar eternamente la carne
pero ya hablamos de los seres vivos

acude a la virtud que tiene en el bolsillo
un polvo que deja caer y la convence
volátil, siente próspera su lucha

está tan cansada, eso sí

vislumbra miles de pequeñas cosas
ya es como los demás que suerte,
se baja y camina sobre la ancha avenida
firme, ¡ahora los quiero ver alucinándola!
muere de risa adentro de un químico

como cualquier partícula en pánico
erra a la puerta de la iglesia en un acto de fe
y entra a rezar por la materia

(de qué Cosmos hablan tus pastores?)

"no te asustes si no me ves exactamente como quisieras,
apela a la calma, abre la boca
y que griten otros"

no es buen diagnóstico para nadie



sábado, 25 de agosto de 2018

moros

también fuiste un hombre
en el abrazo apretado
y un moro tipo fuerte
al desintegrarme

entonces también fui
el polvo que pisabas
mientras te ibas

entré en tu naríz
cuando el viento fue mas fuerte que la quietud de la tarde,
y de las vueltas que tuve intentando juntarme, 
rescato la que fue a dar con mi pecho
porque desde allí me recompuse

los hombres moros me conquistan solo un poco
un rato entre la barbarie y ya me asustan sus dientes

me muerdo los ojos luego

pero

no sé quienes son exactamente los moros
(esos que me persiguen como muertos)
si pudiera dejar de razonar
y el temor se fundiera para una estatuilla
y nada me atravesara la pelvis sorpresivamente

creo

creo que podría enlazar mis brazos con los suyos
y juntos cruzar una peatonal, invencibles

pero sueña mi cuerpo acostado sobre lo que creo

lunes, 30 de julio de 2018

individual

la forma es anterior al paisaje
y en todo atisbo de contorno
dejo golpear mi corazón
contra muros invisibles

- latir es anterior a sentir como me muevo bajo la sábana -

estoy rodeada de frontera, por eso no puedo
por eso me trepo y me arresto:
agarro mis medias y tironeo
mientras me escucho gritar
invasora sin querer
por fugitiva de mí

d e s t e r r a t e  c o r a z ó n

cierro la boca
siento el paladar
me mareo en ojos blancos
y espero caer muerta

en tu bosque

miércoles, 21 de marzo de 2018

te abordás. me tripulo

te abordás como yo
cuando comienza el día?

me subo a mi cuerpo aún con sueño
y le doy a las venas hasta que logro tensarme
lo hago por la identidad del viento, mas que nada
luego la bomba que llevo golpea la superficie

y hablo

y todos los sentidos
navego
me tripulo nuevamente
si es necesario reforzar mi existencia

no me muero

te abordás como yo...
el horizonte es un jurado
al frente me mojo
peino la espuma
y los aromas

cuando huelo tierra firme
lloro el mar del otro día
entero



domingo, 28 de enero de 2018

proyecto con sed

hemos llegado a la luna
y nadie está aquí para abrirnos

menos mal que pude tomarte del brazo en el último trayecto,
en el que parecías desvanecido sobre el sistema
y acercarte a mi cuerpo mojado por el énfasis

por si no lo recuerdas, antes de salir nos bebimos la esperanza de a sorbos
para que el pánico que provoca la fe, no nos juegue una mala deshidratación

tal vez no querías llegar,
es posible que mi impulso
haya inhibido tu arrepentimiento
y ahora quieras matarme
en la puerta de este satélite

intento ahora quitarme este traje
de heroína pegada a mi piel
antes que nos abran el portón

que nada pese tanto!
no me mires tan fijo,
cualquier lugar que elija tu puñal
será recibido con sangre!

espalda con espalda
vos mirás el futuro con pena
y yo la infancia de mis padres

llevar a un creyente por el espacio
(aún con el suave acuerdo de lo humano)
ha sido un castigo divino

miércoles, 10 de enero de 2018

mecánicos

en mi primer década entendí
que andar es movimiento
dejar de pedalear caerme
y otra vez las rodillas
si había brisa
yo era el motor
y si había agua
la salvación

si tengo el chasis tengo casi todo,
pensaba a la altura del pecho de los adultos
la grasa en las manos de mis tíos marcaban rutas
las bobinas eran para hipnotizar niñas de cobre,
era claro en la oscuridad del taller,

si tengo el chasis tengo casi todo
pensaba en los ochenta sobre mis diez
y en casa sobre las hornallas las bujías,
porque se empastan
y entonces la batería no anda
y hay que empujar el auto
y cuando arranca verlo alejarse
para intuirlo luego por detrás
y cuando esté a la par, subir
sublime

se puede amar lo que sea
ruedas, volante, motor, frenos
velocidad y burros de arranque

el trabajo del taller mecánico
fué una de mis primeras lecturas

la fosa jamás me ha dado miedo
además he visto a mi padre
chupar nafta por una manguera

clavé los frenos en el medio de la ruta, puse el de mano y me bajé. Entré un poco en los pastizales y me puse a hacer pis. Había estado todo el viaje bebiendo recuerdos, que son como las frutas, se hacen agua rápidamente. Me picó un bicho que no ví, en la pantorrilla. Volví al auto y el sol del mediodía me dejó sin sombra, toda caliente sobre el chasis. Puse el primer cambio y el horizonte empezó a acercarse.




parte del hábito

                                                                                                                  a la hermana Bety         ...